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| Legislatura: 1854-1856 (Cortes Constituyentes de 1854 a 1856) |
| Sesión: 30 de abril de 1855 |
| Cámara: Congreso de los Diputados |
| Discurso / Réplica: Discurso |
| Número y páginas del Diario de Sesiones: nº 142, 4303, 4304 |
| Tema: Anulación de la concesión del ferrocarril de Sevilla a Cádiz |
El Sr. PRESIDENTE: Advierto a V. S. que está rectificando.
El Sr. SAGASTA: Estoy contestando a las preguntas que me hacía el Sr. González de la Vega.
¿Es posible, repito, que no teniendo ninguna obra, vayamos a empezar por la más superflua? Dejo a la consideración de los Sres. Diputados esta reflexión.
Dice S.S.: el Sr. Sagasta da la preferencia a la navegación del Guadalquivir sobre los caminos de hierro, cuando en todas partes del mundo sucede lo contrario. En Francia, en Inglaterra, en varias partes de América, en los Estados-Unidos, tienen sus vías navegables y caminos de hierro, y aun hay competencia. Es claro; después que tengamos vías navegables, haremos caminos de hierro; después de tener lo necesario, haremos lo conveniente para establecer esa competencia; pero ahora queréis que tengamos caminos de hierro sin competencia, y esto se ha de hacer a costa del Estado.
Decía S.S. que yo me había equivocado al suponer que el Guadalquivir era navegable. ¡Cómo! ¿No es navegable el Guadalquivir, Sres. Diputados? ¿No habéis navegado alguna vez por el Guadalquivir? ¿No habéis ido en muy pocas horas desde Sevilla a Cádiz? ¿No habéis hecho ese bonitísimo viaje? Pues el Sr. González de la Vega dice que es una navegación imposible, que el Guadalquivir no es navegable. ¿No habéis visto, no ha visto el Sr. González de la Vega subir fragatas hasta más acá de Sevilla? Que me conteste a esto el Sr. González.
El Sr. PRESIDENTE: Ha pedido V. S. la palabra para rectificar.
El Sr. SAGASTA: Ya lo sé, Sr. Presidente.
Decía el Sr. González de la Vega que yo estaba [4.303] equivocado calculando que las obras de mejora de navegación del Guadalquivir costarían de 5 a 6 millones de reales, y en cambio S.S. nos ha dicho que costarían 100 millones y que se invertirían ocho años. Pues yo le digo que está altamente equivocado; en el Ministerio de Fomento puede ver el presupuesto detenidísimo, perfectamente estudiado, en el cual aparece que las obras costarán de 5 a 6 millones de reales, con lo cual, no solo será la mejor vía navegable de España, sino que será una de las mejores de Europa. Que es un inconveniente la barra: pues en ese caso abandonad todos los puertos, porque en casi todos hay barra. Los inconvenientes de las barras consisten en el abandono por parte del Gobierno, porque las barras se mejoran con un trabajo constante y desaparece ese inconveniente hasta donde es posible que desaparezca.
Tendría bastante que rectificar; pero voy a concluir haciendo la misma pregunta que hice antes a los Sres. Diputado. ¿Os contentaríais con tener en vuestras provincias carreteras generales y ríos navegables como el Guadalquivir? Contestadme, y después haced lo que os parezca.
El Sr. SAGASTA: El Sr. González de la Vega me ha supuesto una equivocación diciendo que yo había dicho que las fragatas subían tres leguas más acá. No es eso; yo he dicho que tres leguas más allá.
No habiendo quien tuviese la palabra acerca de la totalidad, se pasó a la discusión de los artículos.
Leído el 1.°, se aprobó sin discusión.
Leído el 2.°, y una enmienda al mismo, del Sr. Sánchez Silva y otros, inserta en el Apéndice primero al Diario núm. 131.